Colchón de Muelles ensacados
Los muelles ensacados son muelles que están dentro de pequeños sacos o bolsitas individuales, independientes unos de otros, que favorecen una mayor adaptación del cuerpo y una total independencia de lechos.
Los muelles ensacados son muelles que están dentro de pequeños sacos o bolsitas individuales, independientes unos de otros, que favorecen una mayor adaptación del cuerpo y una total independencia de lechos.
Cada muelle tiene un pequeño diámetro que hace posible aumentar el número de muelles respecto a los que hay en una carcasa de un colchón de muelles tradicional. Esto se traduce en un menor desgaste y los convierte en colchones que tienen una gran durabilidad. Los muelles se unen transversalmente a través de filas de tejido termo soldado individualmente.
Podemos encontrar muelles de diferente diámetro, grosor y altura para conseguir diferentes tumbadas: más firme, más suave, con diferentes zonas de presión en función de la parte del cuerpo que apoya en ellos (el mayor peso está en los hombros y en la cadera), o encontrar colchones con más o menos muelles (en función de su tamaño).
Los colchones de muelles ensacados reducen los puntos de presión, una característica que hace que el colchón se adapte al cuerpo como un guante y que no se deforme.
Presentan una gran firmeza porque recogen el peso y lo distribuyen por toda la superficie. Es un colchón recomendado para las personas que duermen en pareja y no quieren notar la presencia del otro.
Son transpirables, una característica que permite que circule el flujo de aire y que se eviten las humedades y los malos olores, por lo que son colchones recomendables para las zonas calurosas.
El bloque de muelles ensacados se complementa con capas superiores de alguno de estos materiales, o de la suma de varios de ellos: viscolástica, látex, espumas HR, fibras naturales, algodón…. para aumentar su confort o añadir características específicas al colchón. Estas capas complementan el bloque de muelles pero siempre dejando el protagonismo de la tumbada al muelle, que es quien va a soportar la presión del cuerpo al dormir.
Por otro lado, la carcasa de muelles debe estar enmarcada o sujetada lateralmente por algún material (espuma o similar) que evite el desplazamiento de los muelles. Estas capas deben acompañar a la calidad del colchón, ya que una espuma de baja porosidad limitará la circulación de aire por el interior del colchón, o si la capa es muy fina, podría provocar, con el tiempo, un desplazamiento del bloque de muelles hacia los lados y hacia afuera.