Comprar un colchón: qué debo tener en cuenta
Sabemos que buscar un colchón conlleva una labor de aprendizaje importante sobre las novedades tecnológicas ya que es probable que hayan pasado muchos años desde la última compra, por eso queremos dar algunas pautas muy sencillas que sirvan de referencia.
Sabemos que buscar un colchón conlleva una labor de aprendizaje importante sobre las novedades tecnológicas ya que es probable que hayan pasado muchos años desde la última compra, por eso queremos dar algunas pautas muy sencillas que sirvan de referencia.
Dormimos un tercio de nuestra vida. Si hacemos caso a los expertos y dormimos 8 horas diarias, durante los 365 días que tiene un año, y durante los 8 años que tiene de vida media un colchón, nos sale que pasaremos en nuestro colchón más de 23.000 horas. Por tanto, la elección de nuestro colchón debe suponer una decisión tomada con calma.
¿Cuándo cambiarlo? Asocama, la asociación española de fabricantes de colchones, recomienda hacerlo como máximo cada 8 o 10 años, por higiene y confort. Los materiales se van deteriorando con el tiempo, pierden sus propiedades de confort y ya no garantizan ni el descanso ni la higiene. Un colchón en mal estado provoca dolores y hace que te levantes sin energía.
Lo que es bueno para uno no es bueno para todos: las necesidades de descanso son absolutamente individuales. No existe una solución perfecta para todos, debemos dejarnos asesorar para que nos indiquen el producto que más se adapta a nuestra manera de dormir y nuestra fisionomía.
Buscar por materiales y no por necesidades. A veces puede confundir más que ayudar. No debemos obcecarnos con los materiales. Es sencillo, lo que nosotros buscamos es un producto que nos permita dormir bien. La tecnología es el medio para conseguir un buen descanso pero primero hay que saber qué confort es el más adecuado para nosotros. Prueba y fíate de las sensaciones, es lo que importa realmente.
El ancho de mi cama. Si la superficie en la que hemos dormido desde pequeños ha sido de 90×190, debemos mirar ahora, si dormimos en pareja un colchón que tenga al menos 150×190. Solo en la medida de 180×190 estaríamos usando el mismo espacio “vital” que cuando dormíamos solos. El largo de mi cama: Apoyado en la almohada debe de quedar un espacio de unos 10-15 cms. por debajo.
Equipo de descanso. El buen descanso se consigue gracias a la combinación de un colchón, una almohada y una base adecuada. Tenemos tendencia a pensar darle toda la responsabilidad del descanso al colchón, pero en realidad es importante tener en cuenta que una almohada mal elegida o en mal estado puede hacer que el mejor colchón no sea útil porque ese sencillo elemento hará que no podamos dormir.
Alergias. Cada vez más comunes, es importante tener en cuenta este punto a la hora de comprar, no hay que dar nada por asumido, no todos los colchones son iguales ni todos tienen tratamientos específicos.
Temperatura. La temperatura es algo que preocupa porque hombres y mujeres tenemos diferentes termostatos. Aun así, hay principios básicos que mejoran el control de la temperatura en una cama. Los bloques de muelles son el núcleo de colchón con mayor ventilación, gracias a que el aire circula libremente por su interior la capacidad de aireación es máxima.